}

Cáncer invasión de células malignas

2001/02/01 Kortabarria Olabarria, Beñardo - Elhuyar Zientzia Iturria: Elhuyar aldizkaria

El cáncer se habla más de lo deseado. No es de extrañar. Y es que el cáncer genera inquietudes y desesperación en la sociedad, ya que no se puede decir que está dominado; por otro lado, genera un camino hacia la esperanza y una pasión por la lucha, ya que se ve que se están dando pasos. Aunque se habla mucho, conoce, quizás no se conoce tanto. Últimamente se están dando pasos rápidos en todos los ámbitos de la medicina. En la investigación y terapia del cáncer también se ha avanzado mucho. Sin embargo, según todos los expertos, la medida más eficaz contra esta enfermedad sigue siendo la prevención, es decir, la detección precoz. Sin duda, las investigaciones que se están llevando a cabo en la lucha contra el cáncer y los trabajos que se pueden llevar a cabo en el campo de la prevención son de gran importancia. Sin embargo, las terapias aún no son lo suficientemente efectivas.
En la denominación de cáncer se recogen al menos 100 enfermedades.

Cuando en el cuerpo las células anormales crecen y se expanden sin control, y éstas destruyen tejidos y órganos, provocan cáncer. Los causantes de cáncer pueden ser de dos tipos, por un lado genéticos y por otro factores externos -radiaciones, virus, alimentación…-. Sin embargo, el carácter genético de la enfermedad no significa que se transmita entre generaciones, sino que todos los cánceres son debidos a mutaciones en los genes de las células, pero existen algunos tipos de cáncer hereditarios. Tanto en unos como en otros, el mal crecimiento de las células produce tumores.

La formación de tumor es mala, pero la extensión del tumor es aún peor. Este proceso se denomina carcinogénesis. La metástasis celular es imprescindible para la formación de la carcinogénesis, es decir, la contaminación de células malignas por otras células, tejidos u órganos. Cuando el tumor sólo crece, se dice que el tumor es benigno y muchas veces puede ser eliminado quirúrgicamente, mientras que cuando se expande se dice maligno. Cuando fallan los tratamientos contra el cáncer, la metástasis es la principal causa.

Fibroadenoma benigno y maligno.

Para la detección del tumor, normalmente es grande -de 0,5 centímetros de diámetro para poder detectarlo por rayos X y de un centímetro para detectarlo por medio del tacto - y lo forman millones de células. Dado que las células de cualquier tumor proceden de una sola célula, los expertos consideran que el proceso de formación del tumor es muy largo.

En el cuerpo humano hay alrededor de 200 tipos de células. Todos ellos son capaces de desarrollar cáncer, pero el 90% de los casos de cáncer proceden de células epiteliales, carcinomas, mientras que los demás más frecuentes son células musculares -sarcomas-, sanguíneas -leucemias, linfomas y mielomas- y células del sistema nervioso -neuroblastomas y gliomak-. Esto no quiere decir que los epiteliales se enfermen con mayor facilidad, sino que tienen una mayor capacidad para aumentar la enfermedad y, por estar allí donde están, tienen una menor protección frente a factores externos.

Fases del cáncer

Cuando se produce una mutación en una de las genealogías que controlan la célula, su capacidad reproductiva cambia. Esta es la primera fase de cualquier tumor. Esta célula crece un poco más rápido que las convencionales y puede tardar mucho en percibirse.

Carcinoma Bowens

En la segunda fase del cáncer, durante la promoción, diversos factores, incluso los que no son propiamente carcinógenos, contribuyen a aumentar la mutación inicial. En el cáncer de esófago, por ejemplo, la incidencia del alcohol puede ser así. El alcohol puede matar las células del epitelio del esófago, al sustituirlas rápidamente, el riesgo de mutaciones y cáncer aumenta. La duración de esta segunda fase es, sin embargo, muy larga, ya que la segunda modificación genética de la célula requiere millones de células que han sufrido mutación.

Tras el segundo cambio genético, comienza la progresión tumoral del cáncer, con más transformaciones genéticas. En consecuencia, aumenta la capacidad de dañar, las células adquieren la condición de invasoras y provocan metástasis. Según los expertos, las células invasoras se forman junto con el tumor inicial, donde se encuentran las células invasoras potenciales para la detección de tumores. Por ello, a pesar de eliminar el tumor inicial, muchas veces la enfermedad vuelve a aparecer porque previamente una célula invasora "escapa" del tumor.

Beber mucho tiene que ver directamente con el cáncer de boca, laringe, faringe, esófago y hígado.

En la lucha contra la muerte las células son rápidas, ya que son capaces de producir vasos sanguíneos, proceso que se conoce como angiogénesis. Como consecuencia de ello, en un principio el tumor aumenta y las células pueden penetrar en la circulación sanguínea y risearse, provocando el crecimiento de nuevos tumores. Cuando están alrededor de los vasos sanguíneos, las células tumorales deben penetrar en el interior para poder penetrar en la circulación sanguínea y linfática. Cuando se encuentran en el sistema sanguíneo -sarcómico o linfático -carcinoma–, las células tumorales se enfrentan al sistema inmunológico del cuerpo. Si consiguen sobrevivir, las células son capaces de metástasis. Aunque se piensa lo contrario, afortunadamente este proceso no es muy efectivo, ya que sólo el 0,05% del total de células logra completar el proceso. Por tanto, el riesgo de metástasis depende del número de células.

Causas del cáncer

El tabaco contiene gran cantidad de sustancias carcinógenas.

Durante los dos últimos siglos, la investigación de las causas del cáncer se ha centrado en los agentes externos, mientras que en las dos últimas décadas se ha observado que el enemigo está dentro: el cáncer es producido por los genes. Eso sí, por agentes externos. Dicho de otro modo, los carcinógenos provocan cambios en los genes. Estos carcinógenos pueden ser compuestos químicos, agentes físicos y/o microorganismos capaces de provocar infección. De forma individualizada, los principales factores de riesgo son:

  • Edad: el cáncer afecta sobre todo a las personas mayores, por lo que -debido a la creciente esperanza de vida- lo normal sería que el cáncer subiera. De hecho, las posibilidades de mutaciones génicas aumentan con la edad, ya que pueden producirse errores en el proceso reproductivo. Dado que el desarrollo del cáncer requiere más de una mutación, la edad de las personas es un factor muy importante. Según los expertos, cuando el cáncer aparece en los jóvenes, puede deberse a genes heredados o a la exposición a carcinógenos.
  • Tabaco: el tabaco es responsable del 90% de los casos de cáncer de pulmón, pero también afecta a los cánceres de laringe, faringe, boca, riñones, etc. De hecho, el tabaco en sí mismo contiene una gran cantidad de sustancias carcinógenas y, además, produce más sustancias nocivas en la combustión.
  • Alimentación: según los expertos, la alimentación puede influir en el desarrollo del cáncer. Dicen que los alimentos ricos en grasas en general son muy perjudiciales. Sin embargo, todavía no se ha demostrado que una dieta determinada pueda ser una medida preventiva, aunque los expertos nutricionales aconsejan una dieta mediterránea.
  • Alcohol: parece que beber mucho tiene que ver con los cánceres de boca, laringe, faringe, esófago y hígado.
  • Infecciones: algunas infecciones son factores de riesgo para aumentar determinados tipos de cáncer: Epstein-Barr virus, herpes, hepatitis B, infecciones de la bacteria Helicobacter pylori, virus del sida, etc. Según la teoría, al producirse todas estas infecciones específicas el sistema inmunológico pierde capacidad y es en esta situación donde se puede producir cáncer.
  • Radiaciones: no se conocen muy bien, pero los científicos creen que la exposición a rayos X y rayos gamma puede causar cáncer. Se han realizado numerosos estudios al respecto, pero todavía no se ha podido demostrar que las radiaciones emitidas por los electrodomésticos, las que pueden generar las líneas de alta tensión, etc. son causa del cáncer. Como es sabido, las radiaciones ultravioletas de los rayos solares son los principales factores de riesgo para el desarrollo del cáncer de piel.

Como es normal, la ciencia sabe mucho más sobre los cambios genéticos que se producen en las células que desarrollan cáncer en los últimos 25 años. Gracias a ello, ahora se conoce mejor que antes el proceso que convierte las células normales en anormales.

Está claro que cuando se descubre cómo se controla la reproducción en la célula y cómo se pierde ese control, cómo estas células se convierten en invasoras y cómo se escapan a la respuesta inmunológica del cuerpo, se pueden encontrar drogas y tratamientos que disminuyan la incidencia del cáncer. Parece que la generación de nuevos conocimientos y tecnologías y la formación del genoma humano van a ayudar dentro de unos años a identificar y evitar los cambios genéticos que se producen en cada tipo de cáncer y en cada paciente. Cuando esto llegue, la detección se podrá realizar antes, el diagnóstico será mejor y los tratamientos podrán ser más eficaces. Mientras tanto y a pesar del gran avance, la complejidad de los cambios en las células cancerosas es elevada, por lo que todavía queda mucho por conocer.

La prevención como medida más eficaz

Jesus Mari Carrera, responsable del área de prevención de Onkologikoa Donostia.
B. Corcho

En el Instituto Oncológico de San Sebastián intentan curar la enfermedad, pero no sólo en eso, sino que le dan mucha importancia a la labor preventiva. Este trabajo no tiene límites, ya que permite llegar al consejo más sencillo desde el uso de tecnología punta para realizar diagnósticos concretos.

Según el responsable del área de prevención de Onkologikoa en Donostia, Jesús Mari Carrera, en la lucha contra el cáncer se distinguen varios niveles de prevención. "Nosotros distinguimos cuatro niveles, aunque uno de ellos todavía empieza, porque no se hace".

La prevención primaria tiene como objetivo reducir la incidencia de los factores de riesgo. "El cáncer es una enfermedad provocada por la predisposición personal y factores externos. En este primer nivel nuestro trabajo está orientado a reducir estos factores de riesgo. Estos factores externos pueden ser físicos, químicos o biológicos".

Según la carrera, los factores físicos se definen teniendo en cuenta las radiaciones ionizantes, los rayos X, las radiaciones solares, la radiación resultante de la energía nuclear, etc. En cuanto a los factores químicos, hay que hablar de sustancias que entran de alguna manera al cuerpo, sobre todo tabaco y alimentos. "El 30% de todos los cánceres de tabaco son causantes directos, lo que ya está demostrado. Esto no quiere decir, sin embargo, que la quemadura no sea dolorosa, ya que puede deberse a las tendencias previas de cada uno. En cualquier caso, está claro que el tabaco tiene una gran influencia en el número de casos de cáncer. La dieta mediterránea sigue sin demostrarse, según los estudios realizados, en general, se cree que comer mucha grasa y poca verdura aumenta las posibilidades de desarrollar cáncer, por eso recomiendan la dieta mediterránea, pero no está del todo claro. De hecho, las investigaciones que se llevan a cabo han analizado pequeños grupos de población en poco tiempo, lo que no es muy significativo. Por eso es posible oír hoy que el café es muy bueno para evitar el cáncer y mañana lo contrario". Los factores biológicos son los causados por los virus.

La importancia del diagnóstico precoz es cada vez mayor.

De la misma manera que cuidar los factores que pueden desencadenar el cáncer y evitarlos en la medida de lo posible, la detección en el tiempo no sirve menos. De hecho, en algunos casos de cáncer la aparición de la enfermedad puede ser larga y tardía cuando aparecen los primeros síntomas de la enfermedad. Por ello, el segundo nivel de trabajo preventivo, el diagnóstico precoz, es de vital importancia. "Las mamografías femeninas, los estudios de mama, están ya arraigadas como medidas preventivas en la mayoría de los hospitales, incluso entre las mujeres. La mamografía se ha convertido en una costumbre. Por tanto, es posible realizar un diagnóstico precoz. Así mismo, con motivo de las visitas al ginecólogo, en los casos de cáncer de útero. Como se puede apreciar en las revisiones habituales, existe también un diagnóstico precoz.

Por otro lado, en determinadas visitas médicas se puede realizar un diagnóstico precoz en el caso de los cánceres de garganta, piel o vientre. Ante ciertos síntomas, también realizamos técnicas más precisas, colonoscopias, estudio de las heces en presencia de sangre… pero aplicado a cada caso, no es algo que se hace a la mayoría como en el caso de la mamografía. En resumen, diríamos que en el caso de la mama y el útero hacemos un diagnóstico precoz, incluso en otro grado, en los cánceres de garganta, digestivo, próstata y piel. La principal dificultad del cáncer es que en algunos tumores la detección precoz es prácticamente imposible".

La mamografía se ha convertido en una costumbre.

Al igual que en el caso de las mamografías o estudios ginecológicos, puede haber algún otro tipo de plan general de estudios. Desde fuera no parece que sea la peor solución. Jesus Mari Carrera, sin embargo, no es así: "¿Plan general de exploraciones? Sería demasiado caro y no solucionaría mucho. Todo es una cuestión de equilibrio. Si luego no hay resultado, ¿hasta qué punto y cuánto esfuerzo hay que hacer para detectar todo tipo de cáncer? En el caso del cáncer de mama se observa que el esfuerzo merece la pena, ya que posteriormente se ha podido desarrollar una técnica de gran influencia y no tan costosa. Cuando es así, está claro que hay que hacerlo, pero mientras no ocurra…".

En cuanto a la prevención, los dos trabajos mencionados -evitar los factores y realizar un diagnóstico precoz– serían los más importantes, pero también hay un tercero, que muchas veces es más terapia que prevención. "A pesar de no ser malignos o malignos en la aparición de algún tumor o en la aparición de ciertos síntomas, intentamos eliminar el tumor antes de que lo bueno se convierta en malo. La terapia puede ser, sin embargo, una medida preventiva". Medida tomada de cara al futuro para evitar futuros errores.

Es conveniente realizar una visita periódica al médico.

Sin embargo, también están en marcha técnicas que miran más lejos que eso, que marcan de alguna manera el futuro del trabajo preventivo. "Aquí todavía no lo hacemos y en otros lugares todavía está en fase de experimentación, investigación genética. Es decir, se analiza la tendencia de las personas a desarrollar cáncer. Esta técnica aún se está desarrollando. Se trata de una técnica de alto coste, tanto desde el punto de vista económico, en el que las personas deberían analizarse individualmente y desde el punto de vista de la historia de sus antepasados, como desde el punto de vista psicológico. ¡Imagina que para cada uno de nosotros tenemos una gran oportunidad de desarrollar un determinado tipo de cáncer! Vivir con ello sería duro, pero al mismo tiempo esto podría ayudar a evitar los factores externos que pueden provocar este tipo de cáncer".

En terapia también hay esperanza en los genes

Arrate Plazaola, médico del Onkologikoa Donostiarra.
B. Corcho

La cirugía es una de las técnicas utilizadas en la lucha contra el cáncer. "A veces -Arrate Plazaola, médico del Onkologikoa de San Sebastián- es suficiente con eliminar el tumor, pero la mayoría de las veces junto con la cirugía establecemos algún tratamiento para asegurar más". Los tumores cutáneos, pulmonares y digestivos son los que presentan un mejor resultado quirúrgico. "En general, los mejores resultados se obtienen con tumores sólidos, sobre todo en los primeros estadios de la enfermedad".

Al hablar de terapias contra el cáncer la gente se asusta porque tiene efectos secundarios. La propia cirugía, además del período de recuperación postoperatoria, no tiene efectos especiales, mientras que la radioterapia y los tratamientos sistemáticos -quimioterapia, hormonoterapia y tratamiento biologico- sí. Sin embargo, la diferencia entre las radioterapias y los tratamientos sistemáticos radica en que la radioterapia afecta a una determinada parte o zona del cuerpo, mientras que el resto afecta a todo el cuerpo.

La radioterapia, por tanto, se dirige a zonas concretas del cuerpo y se utiliza cuando el tumor no está bien identificado y extendido, como en los ganglios.

Los botiquines han aumentado mucho.

Entre los tratamientos sistemáticos, el más conocido es la quimioterapia, pero se utilizan al menos otros dos, como la hormonoterapia y los tratamientos biológicos. "Mediante la quimioterapia pretendemos romper el sistema de multiplicación de células tumorales, de ahí que se produzcan otros efectos, vómitos, caída del pelo, etc. Generalmente administramos quimioterapia a través de la sangre. Sin embargo, en algunos casos, en muy pocos casos, podríamos hacerlo también mediante pastillas. Todo tiene que hacerse en el hospital, ya que tanto la quimioterapia como el descanso posterior sería demasiado duro para llevar en casa. Este es el mayor o menor error de la quimioterapia, ya que los efectos secundarios afectan a todas las células tanto a los enfermos como a los sanos".

La terapia más desarrollada para combatir el cáncer es la hormonoterapia. La hormonoterapia, como en el caso de la quimioterapia, pretende romper el sistema de duplicación celular. Al coger la píldora se envían las señales al núcleo de la célula, con lo que se ordena que no se duplique. Encuentra la membrana que provoca el aumento y, sin romperlo, la amortigua o la detiene. El efecto suele ser largo. "Lo damos con las pastillas que tiene que coger el enfermo y no tienen efectos secundarios. Dependiendo del tipo de cáncer, la hormonoterapia, como la de mama, la de útero y la de próstata, son muy adecuadas para tratar de curar con hormonoterapia. En cualquier caso, antes de optar por este u otro tratamiento, el patólogo debe indicar si el paciente tiene o no receptor". Según Arrate, aunque a veces se empieza a aplicar hormonoterapia, también se puede pasar a quimioterapia. "Muchas nuevas hormonas están emergiendo y eso también ayuda a abrir el recinto".

Aunque se ha avanzado mucho, todavía no hemos encontrado ninguna vía para superar todas las variantes del cáncer y curarlo completamente.

El objetivo de los tratamientos biológicos es influir en las características genéticas de las células. Se trata de tratamientos venosos que se están investigando mucho. La terapia de los tratamientos biológicos puede ser pasiva o activa. La terapia pasiva más utilizada es la de anticuerpos monoclonales. Una vez introducido el fármaco por la vena, actúa sobre células con determinadas características genéticas, dejando al resto en paz. Por eso esta técnica no tiene efectos secundarios, ya que actúa contra proteínas concretas. Cuando la inmunoterapia es activa, se busca por un lado la recuperación del propio sistema inmunológico y, por otro, obligar al sistema inmunológico a producir sustancias que no contiene. "En estos casos hablamos de vacunas antitumorales. Introducimos en el cuerpo productos que pueden suscitar el sistema inmunológico, los interferones, sobre todo en los casos de melanoma y leucemia. Por último, utilizamos interleucinas. El cuerpo no puede producir determinadas sustancias y nosotros las introducimos mediante interleucas".

Aunque se observa que el futuro de los tratamientos biológicos puede ser fructífero, en la actualidad se trabaja mayoritariamente con hormonoterapia. De hecho, una vez usada la hormonoterapia, se puede pasar a la quimioterapia, se pueden hacer combinaciones. "Todavía no hemos dominado los cánceres. Los resultados son cada vez mejores, conseguimos curar muchas leucemias, cáncer de testículos, mama y otras, pero todavía no hemos encontrado una vía para superar todas las variantes de esta enfermedad y curarla completamente. Sin embargo, las cosas están cambiando mucho. Aunque ahora sea cáncer, existe la posibilidad de alargar la vida, de transformar lo que era una enfermedad dura y agresiva en muchos casos en enfermedades crónicas". Como se ve, los investigadores trabajan bien y se puede decir que cada día se avanza algo, pero no se puede saber cuándo se va a ganar al cáncer.

Gai honi buruzko eduki gehiago

Elhuyarrek garatutako teknologia