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Accidente de Columbia

2003/02/04 Carton Virto, Eider - Elhuyar Zientzia

El transbordador Columbia se desvaneció en el aire cuando faltaban pocos minutos para aterrizar el pasado sábado. La NASA ha iniciado una investigación para aclarar las causas del accidente, pero muchos expertos ya han opinado. Parece que la clave puede estar en las placas que protegían al envase de la fricción atmosférica.
En el accidente del sábado murieron siete tripulantes.

Transbordadores espaciales

son sometidos a una fuerte fricción y calor cada vez que descienden del espacio y entran en la atmósfera. Resisten temperaturas de unos 10 minutos o 1.650 ºC. Por lo tanto, están bien protegidos para evitar su destrucción.

Los transbordadores tienen dos tipos de material. Las zonas más afectadas por la fricción, los extremos del envase y las alas, están protegidas por resinas reforzadas con carbono. Este material está cubierto por una capa de carburo de silicio capaz de soportar 1650ºC sin deshacer.

El resto de partes aguantan temperaturas inferiores y se recubren con placas de fibras de silicio. Las placas se sintetizan como materiales cerámicos y tienen una enorme capacidad de disipación del calor; se pueden extraer del horno a la altura de un segundo y recogerlas en las manos. Pero al mismo tiempo son muy porosos y no tienen mucho peso. Por tanto, son muy apropiados para su uso en el espacio.

En los últimos años la adición de boro ha permitido sintetizar mejores materiales, sustituyendo las placas de silicio en determinadas zonas de los transbordadores por otras de silicio, pero en general, todavía se utilizan placas de silicio para proteger el cuerpo de los envases.

Las placas mencionadas en estos días son de las más robustas, es decir, de resina reforzada con carbono. Parece ser que cuando el transbordador se lanzó al espacio algo chocó en la ladera izquierda y ahora se cree que el golpe provocó el desprendimiento o deterioro de alguna placa. En consecuencia, al entrar en la atmósfera, se dice que la zona se calentó demasiado y provocó un accidente.

En la transbordadora Columbia se realizaron varios estudios científicos en el módulo de investigación SPACEHAB. El coste del módulo fue de 100 millones de euros.

Al día siguiente de que el NASA saliera al espacio, se dio cuenta de que había caído algo del tanque de combustible, al ver los vídeos del lanzamiento, pero se hicieron pruebas y concluyeron que el barco estaba bien. El accidente se ha centrado en el suceso. La NASA investiga los datos obtenidos antes de la recogida y destrucción de las partes del buque. De momento no han dicho nada claro.

Transbordador más antiguo

Sin embargo, la caída de placas no es la única hipótesis que se ha comentado estos días. Columbia era el transbordador más antiguo de la
NASA, 22 años, y algunos creen que era demasiado antiguo. Aunque al final de cada viaje se revisan todas las placas del barco y se modifican las deterioradas, algunos expertos creen que el material estaba ‘agotado’.

Columbia ha realizado un total de 28 viajes, pero muy pocos desde 1999. Ese año le hicieron varias innovaciones y desde entonces sólo se espació el año pasado. Este viaje era el segundo después de su renovación y estaba previsto para julio de 2002. En aquella época, sin embargo, se descubrieron grietas en todos los transbordadores y se retrasaron los vuelos.

Y es que, a pesar de su apariencia, los transbordadores no son un invento nuevo. La NASA construyó en 1980 envases que podían ser utilizados una y otra vez y que, a pesar de la gran revolución que sufrió, la intención era ir más allá.

Los transbordadores se usarían durante una década y mientras tanto desarrollarían barcos más seguros y baratos. En 1994 la NASA puso en marcha el Programa de Transporte Avanzado para desarrollar una tecnología diez veces más barata y segura que aquella. Los
nuevos vehículos fueron denominados X-33, X-34, X-37 y X-38, pero tras derrochar mil millones de dólares, los vehículos eran demasiado caros y abandonaron el proyecto hace dos años. Anunciaron que iban a empezar a buscar otra estrategia y, mientras tanto, seguirían con los transbordadores, si fuera posible a partir de 2020.

Es evidente que NASA no está pasando la época de oro. El gobierno estadounidense ha reducido mucho sus presupuestos en los últimos años y, en línea con el accidente, más de uno ha afirmado que la escasez de dinero había provocado una reducción de las medidas de seguridad.

En abril del pasado año, expertos en seguridad de vuelo denunciaron en el congreso estadounidense la actuación de la NASA. Se dijo entonces que la seguridad no se estaba velando. En diez años el presupuesto de los transbordadores se ha reducido en un 40%, por lo que se consideraba que la NASA ha reducido la calidad de los trabajos.

Primer lanzamiento del transbordador Columbia. 12 de abril de 1981.

La NASA despidió a cinco de cada nueve miembros de este grupo en la época de las críticas, para dar cabida a gente más joven.

Pero entre crítica y crítica, la NASA ha recibido estos días unas alegres noticias, porque el presidente Bush anunció que aumentará un
3% los presupuestos de la NASA. La NASA y los transbordadores dispondrán para el próximo ejercicio de 14.500 millones de euros, 3.826 millones de euros en lugar de 3.210 millones.

Estación Espacial Internacional

En los últimos tiempos los problemas presupuestarios de la NASA habían puesto en cuestión también el proyecto de la Estación Espacial Internacional, ya que no eran los únicos que se dedicaban a la ‘escasez’ de dinero.

En septiembre del año pasado los rusos informaron de que Soyuz estaba sin dinero para construir más barcos, y que si no se ponía a trabajar en seguida, en 2004 los astronautas no iban a viajar a la estación. Inmediatamente después de la queja, les dieron dinero, por lo que parece que las cosas han mejorado, a pesar de que los objetivos iniciales de la estación difícilmente se cumplirán.

Webs de interés:
NASA
NASA Human Spaceflight
Space Transportation System
Spaceflightnow

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