Cucaracha caótica

2010/01/19 Kortabitarte Egiguren, Irati - Elhuyar Zientzia

• Robotika
• Fisika

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Basándose en la teoría del caos, varios investigadores del Centro Alemán de Neurociencias Computacionales Bernstein han desarrollado un robot con forma de cucarachas, AMOS.

El robot AMOS consta de seis patas, 18 motores para controlar el movimiento de las piernas y 18 sensores para informar sobre el calor, la luminosidad y el contacto con el suelo. El objetivo de los investigadores ha sido desarrollar un procesador convencional capaz de adaptar la marcha del robot de forma rápida y automática a los cambios que se producen en el entorno.

Para ello se han basado en la teoría del caos. Según esta teoría, los sistemas son muy sensibles a los pequeños cambios que, a su vez, pueden provocar grandes cambios. Los investigadores han construido un sencillo circuito para superar comportamientos complejos. El procesador de este circuito utiliza un algoritmo caótico para crear y clasificar posibles modificaciones, eliminando inmediatamente los cambios inadecuados.

Gracias a esta técnica de control del caos, el robot AMOS puede circular por tierras duras y rugosas, escapar de los depredadores y elegir una marcha de ahorro energético cuando la cuesta sube. También es capaz de mantener el equilibrio cuando pierde equilibrio o mete el pie en un agujero y sacar el pie del agujero.

Han visto que esta combinación entre la teoría del caos y la robótica puede ayudar a comprender los movimientos de los animales y que puede tener aplicaciones médicas como la epilepsia, el parkinson o la estabilización de la actividad neuronal dañada en pacientes con migrañas. Entre otras cosas, los investigadores alemanes investigan algunas de las ondas que se producen en el cerebro antes de que aparezcan las migrañas, ya que creen que algunas reacciones que se producen en el cerebro en personas sanas eliminan esas ondas. Por tanto, es posible que en un futuro se utilice el control del caos para eliminar estas ondas.

Imagen: P. Manoonpong et at.