Unai Ugalde: “Tenemos un sistema inmaduro y joven”
Unai Ugalde: “Tenemos un sistema inmaduro y joven”
Unai nos pidió tiempo. ¿Has tenido suficiente? ¿Ya te ves Director de Política Científica?
Bueno, aunque la política científica es compleja en sí misma, yo ya conocía desde otro punto de vista la política científica, como usuario y como científico. Por lo tanto, esta temporada he estado inmerso en un proceso de adaptación. En consecuencia, puedo decir que ahora estoy en condiciones de dar a conocer algunas ideas y opiniones. Y, de cara al futuro, sé que voy a tener mucho trabajo para todo el mundo en la provisión y promoción de nuestra política científica y nuestro sistema científico.
Los primeros son pasos de adaptación y actualización, pero como hasta ahora has sido decano de la Facultad de Química, no es la primera vez que ocupas cargos de responsabilidad.
No, hace cinco años empecé a trabajar como decanato y ahí empecé a dedicarme un poco a la política científica. Luego fui decano durante dos años y hace tres meses me nombraron Director de Política Científica, por lo que estoy trabajando en un campo más amplio, pero con los amigos que tenía antes, y quería trabajar las cosas así.
Estamos hablando de la Dirección de Política Científica, pero ¿qué es ese cóctel de ciencia y política?

Yo citaría principalmente tres tareas. En primer lugar es un trabajo de planificación, hacer ciencia no es un trabajo que se genera de un día para otro, sino que hay que planificarlo. Hay muchos recursos, es muy caro, y para el pueblo tener una política científica directa es estratégicamente muy importante. Por lo tanto, el primer trabajo está en la planificación: ver qué recursos tenemos, qué puntos fuertes tenemos, qué carencias tenemos… y en ese sentido, orientar adecuadamente los recursos.
Se trata de impulsar una segunda tarea, es decir, aunque en la Comunidad Autónoma del País Vasco no haya competencia estatal en la actualidad, no haya recursos económicos… El Gobierno Vasco en los últimos 18 años ha hecho un gran esfuerzo por impulsar la ciencia y la tecnología, y una de nuestras tareas es impulsar. Tenemos que tomar decisiones concretas para trasladar la ciencia de un lado a otro.
Por último, mencionaría la necesidad de ampliar las relaciones. La ciencia, como el arte y otras cosas, es un trabajo sin fronteras. Los científicos no son de un país u otro, son de todo el mundo, se arreglan juntos y nosotros tenemos que ayudar a los científicos vascos a que se pongan en contacto con los demás. Con estas tres cosas resumiría el papel de la Dirección de Política Científica.
Han pasado tres meses desde que tomó el nuevo cargo. ¿Cómo ha visto Unai en esta temporada la situación de la ciencia en el País Vasco?
Bueno, más o menos parecido a lo que veía antes, pero mucho más exactamente. Por un lado he visto un sistema inmaduro y joven. En Euskal Herria hemos empezado a hacer ciencia con seriedad y recursos en los últimos 15 años. Este tiempo es muy corto y por eso no está maduro.
Por otra parte, la planificación de la política o sistema científico que tenemos no ha sido nuestra, sino la que se ha realizado en base a esquemas que nos han venido de fuera, y nuestro sistema científico todavía no se ha adaptado a nuestras necesidades. Como es joven, también es pequeño: oficialmente en el País Vasco 4 de cada 1.000 habitantes se dedican a la ciencia, son científicos. Sin embargo, yo creo que estos no son datos reales, en la práctica diría que los científicos sólo son 2 de 1.000. En localidades cercanas como Francia, Inglaterra o Alemania son más de 7. Con esto quiero decir que todavía tenemos pocos científicos.
Desde otro punto de vista, que es joven y pequeño, yo creo que también es un futuro prometedor, vigoroso. El porcentaje medio destinado a la investigación en nuestro Producto Interior Bruto es del 1,24%, mientras que el de Europa es del 1,8%. Si se compara con el Estado, hay que decir que estamos por encima, aunque no haya transferencia ni competencia.
La cuestión de las transferencias está ahí sobre la mesa, y también ha sido noticia la negación de la transferencia de competencias de las investigaciones. ¿Cómo se puede valorar?
El pasado 12 de mayo el consejero Oliveri mantuvo una conversación con el señor Rajoy, llegando a un cierto consenso: a partir de ahora se iniciarán conversaciones a través de la cooperación para abrir un cauce de transferencia. En base a ello, a partir de ahora se analizarán los pormenores y se iniciarán las negociaciones, en las que se considera que el País Vasco va a adquirir los derechos que le corresponden. Si es necesario no será en un solo golpe, pero a partir de ahora tendremos la tarea de encauzarlo.
¿Cómo se puede trabajar por la ciencia y la tecnología si no hay recursos?
Bueno, hay muchos tipos de recursos. Uno de ellos son las personas, es decir, la imaginación, el entusiasmo… y sin eso el dinero no sirve para nada. Ese es nuestro mayor activo, la gente. Otro tipo sería el sistema educativo, porque sin una buena educación no tendremos gente adecuada. Y luego hay el resto de recursos, Euskal Herria tiene los suyos, aunque no recoge la cantidad que da al Estado a través del cupo correspondiente. Pero es cierto que se reciben fondos de la Unión Europea y que hay una cierta participación en programas abiertos, aunque por debajo de lo que queríamos.
¿Cuál cree que es o al menos debería ser el espejo de la ciencia en la Comunidad Autónoma del País Vasco? ¿Madrid o Europa?

Yo creo que realmente no se puede decir uno u otro. Como he dicho, el sistema científico no tiene ninguna limitación. Historiaz Hego Euskal Herria ha estado integrada en el Estado español y ha mantenido una intensa relación con la universidad y el sistema industrial. Aquí, aparte de la administración, está relacionado con diferentes investigadores, centros y sistemas.
Por otra parte, nuestros compañeros de viaje, del norte, son los que realmente tienen los sistemas más desarrollados de Europa, que son los que forman el pelotón que debemos seguir. Está claro, sin embargo, que las relaciones tienen que ser con ambas, porque aportan cierto rendimiento y favorecen el desarrollo para ambas partes. Por lo tanto, no existe ninguna exclusión.
Ciencia y política, un cóctel bastante raro. ¿Qué Unai está más en la Dirección de Política Científica, científico o político?
En realidad soy científico, pero ahora tengo que trabajar en política. Antes de responder directamente a tu pregunta me gustaría decir que el sistema científico es un bien público que hay que organizar. Para organizarlo, por un lado, se necesitan políticos –ahora el problema de la transferencia lo abordan los políticos, por ejemplo–, administradores —para gestionar adecuadamente los recursos y canalizarlos profesionalmente—, técnicos —para ayudar a los científicos en el laboratorio— y, por supuesto, científicos. Al final este colectivo, aunque cada uno tiene sus objetivos particulares, se reúne para cumplir el objetivo público. Estos objetivos públicos —ciencia, arte, cultura…— forman parte del patrimonio público. Por tanto, se necesitan todo tipo de profesionales para promover un sistema de investigación equilibrado.
¿Qué haré más, política o ciencia? Está claro que tendré que hacer política, aunque no sea mi profesión básica, pero lo haré contento, porque creo que en este momento es el mejor servicio, que será un trabajo a favor de la ciencia y la sociedad de Euskal Herria.
Buletina
Bidali zure helbide elektronikoa eta jaso asteroko buletina zure sarrera-ontzian