Fotos sin plata

2003/02/01 Carton Virto, Eider - Elhuyar Zientzia Iturria: Elhuyar aldizkaria

• Irudiak/Soinuak

El nuevo método ha desplazado la plata a los ácidos. Trabajando con ácidos han conseguido crear la foto en un solo paso, abaratando y reduciendo el uso de compuestos químicos. Y no sólo eso, sino que ofrece la posibilidad de ampliar espectacularmente las fotos sin perder transparencia. Ver la foto del tren que han mostrado como ejemplo.

Después de ver un resultado tan sorprendente, aunque no creyente, estarás deseando conocer los detalles, pero antes de explicar los pormenores del nuevo método, mejor recordar las bases de la fotografía. En definitiva, ambos procesos no son tan diferentes.

Plata, base de la foto

La luz y las sales de plata son la base de la fotografía desde hace 200 años. El corazón de las películas fotográficas son cristales de haluro de plata. Cuando pulsas el botón de la cámara y dejas que la luz llegue hasta la película, se produce una reacción fotoquímica: las sales se convierten en plata metálica. En zonas muy iluminadas se creará mucha plata y viceversa en zonas poco iluminadas. De esta manera se creará un borrador de la foto en la película.

La foto del tren es de métodos tradicionales. En la foto antigua la piedra del ferrocarril apenas se ve; si se amplía la piedra, la separación de algo sería difícil con los métodos tradicionales, pero la nueva técnica ha permitido obtener una foto ampliada de enorme calidad.

POLAROID

Cuando la película es de color, la única capa de sal de plata se sustituye por tres. Cada capa es sensible a un color primario, azul, verde y rojo en la fotografía, lo que significa que las sales de cada capa sólo se transformarán en plata metálica cuando reciban la luz del color correspondiente. El resto de colores se sintetizan a partir de ellos cuando se realizan todas las fotografías y se revela la película.

Antes de revelar, se dice que en la película hay fotos sordas en lugar de fotos, porque no están completamente definidas, porque son como un borrador. Precisamente, el primer paso que se da en el laboratorio es definir completamente las fotografías, convirtiendo más sal de plata en plata metálica. La reacción se realiza controlando estrechamente el tiempo, la temperatura y la agitación, reforzando la senda fotográfica pero evitando el deterioro de la foto. Una vez definida correctamente la foto en negativo, el proceso de revelado se detiene y los negativos se limpian.

Las fotografías de los negativos se realizan de forma similar, proyectando las imágenes en papeles recubiertos de sales de plata y siguiendo el mismo procedimiento descrito.

En el caso de las películas de colores, el proceso tiene la misma mecánica, pero es más complejo, ya que se necesitan más soluciones, se hace a oscuras totales y una vez fijados los colores se debe quitar toda la plata a las fotos.

Ácido en lugar de plata

La fotografía lleva tiempo buscando algún método que sustituya a la plata. Lo mejor sería un sistema de una sola etapa, preferiblemente sin necesidad de añadir o quitar ningún reactivo químico. En la actualidad existen procesos de revelado en seco, pero estos también utilizan sales de plata que, al igual que los convencionales, requieren un gran control.

El nuevo método es más rápido que las impresoras de grifo de tinta, por lo que puede ser apropiado para imprimir imágenes en cámaras digitales.

El método presentado por Polaroid descarta la plata y crea fotografías a partir de ácidos. La estructura del papel de revelado es similar a la tradicional, con capas sensibles a los tres colores primarios, pero en este caso las tres capas están duplicadas. Los químicos de Polaroid han preparado un sistema de dos capas para cada color. Uno de ellos contiene componentes sensibles a la luz y otro con colorantes sensibles al ácido. La imagen se forma en esta segunda capa.

El nuevo sistema aprovecha la luz y el calor. En el primer paso se utiliza la luz para descomponer las sales de yodo de la primera capa y obtener un ácido fuerte. A continuación se calienta el papel para que se active un compuesto químico de la segunda capa. Esto y el ácido robusto provocan la síntesis de un ácido más débil, que pasa a la segunda capa y convierte sus colorantes en colores.

Las imágenes para sacar fotos de los negativos se proyectan en papeles recubiertos de sal de plata.

Una vez creada la imagen, sólo queda el proceso de revelado gracias a una base que neutraliza los ácidos. La base se genera cuando el papel se calienta y se esparce de la segunda capa a la primera. Al extenderse más lentamente, los ácidos tienen el tiempo suficiente para crear la foto antes de ser neutralizados.

Según los investigadores, este método permite evitar problemas de sobreexposición al revelado.

Lamentablemente, por el momento no es muy sensible a la luz visible, pero puede ser ideal para trabajar con láser o diodos. Según los investigadores, es más rápido que las impresoras de chorro de tinta y es apropiado para imprimir imágenes en cámaras digitales. A nivel industrial, por su parte, consideran que puede servir para crear plantillas para imprimir periódicos. Pero en las cámaras normales tenemos que seguir con las películas de siempre.