Exposición de los sentidos virtuales
2006/11/01 Elhuyar Zientzia Iturria: Elhuyar aldizkaria
Los protagonistas de historias de ciencia ficción tienen a menudo sentidos artificiales. Gracias a ellos, reciben una amplia información del entorno, más amplia de la que podemos recibir las personas normales, y su interacción con el entorno es diferente. Lo que para nosotros es una frontera no es un obstáculo para ellos.
De la ciencia ficción a la realidad, los científicos han dado grandes pasos en la digitalización de los sentidos y en el desarrollo de los sentidos artificiales. Así lo anunciaron el pasado mes en el Parque Tecnológico Miramon de San Sebastián, a través de una jornada titulada Zientziumena.
La jornada, organizada por la UPV-EHU, la Diputación Foral de Gipuzkoa y Bic Berrilan, contó con la presencia de expertos que expusieron los avances realizados en un par de ámbitos: herramientas o aplicaciones que desarrollan las personas con discapacidad para superar sus limitaciones y, por otro lado, de alimentación/gastronomía.
Para compensar los sentidos limitados, los investigadores recurren por dos vías. En uno de ellos tratan de sustituir el sentido limitado por otro. Como ejemplo de ello, la jornada contaba con una aplicación que hace sonar textos escritos en Internet.
La otra vía consiste en aumentar la capacidad sensorial a través de sensores externos. Por ejemplo, la aplicación Iriscom permite a las personas con movilidad reducida utilizar el ordenador mediante el movimiento de los ojos. Otro ejemplo es la silla de ruedas autónoma.
En cuanto a la alimentación y la gastronomía, las estrellas de los sentidos eran el olfato y el gusto. Por ejemplo, explicaron la evolución de la lengua electrónica y mostraron la herramienta desarrollada en el Instituto de Microelectrónica de Barcelona. Además, un investigador de la Universidad Standford presentó la aplicación TasteScreen. En la pantalla del ordenador, este instrumento genera una capa líquida con el sabor deseado. Lo mismo hace, pero con olores, Vortex Activa, ya que este sistema genera el olor deseado y, cómo no, había una nariz electrónica, NELAS.
Fue una jornada para poner todos los sentidos en alerta. Sin embargo, los investigadores reconocieron que la época de la sustitución de los sentidos por sistemas artificiales todavía está lejos. Eso sí, demostraron que se están dando avances espectaculares y útiles.
