Detector de fugas de gas
2002/12/16 Atxotegi Alegria, Uhaina - Elhuyar Zientziaren Komunikazioa
La investigación que está llevando a cabo CEIT y Gas de Euskadi tiene como objetivo detectar las fugas de gas en los hogares. Para ello, han desarrollado un sistema basado en microsensores: La joven investigadora del CEIT Gemma García Mandayo y algunos de sus compañeros han analizado las técnicas de creación de microsensores de óxido de estaño. De hecho, el uso creciente del gas natural en los hogares, la próxima puesta en marcha de una nueva legislación de detección de monóxido de carbono en los hogares y el creciente número de consumidores demandan detectores de fugas de gas.
Para prevenir las fugas de gas y evitar la generación de monóxido de carbono es imprescindible disponer de instalaciones adecuadas y un buen mantenimiento de los aparatos de gas, de acuerdo con la normativa vigente. Sin embargo, los sistemas desarrollados por los investigadores del CEIT con el objetivo de mejorar la seguridad, sirven para reducir los riesgos de explosiones que pueden causar fugas de metano (principal componente del gas natural) y de venenos derivados de la inhalación de monóxido de carbono (gas sin color ni olor).
Dadas las características del monóxido de carbono, es imposible detectar este componente sin sensores. La buena ventilación de las zonas donde se producen las combustiones es una medida a tener en cuenta, pero por diversas razones, el riesgo de acumulación de este gas es siempre de alta densidad, sin colores ni olores. Según la revista Journal of the American Medical Association, el monóxido de carbono es el elemento más mortal de los accidentes en Estados Unidos. El
microsensor de gas que están diseñando los investigadores del CEIT ha incorporado un calentador para que la capa de óxido de estaño alcance los 300ºC (el monóxido de carbono se puede detectar a partir de esta temperatura).
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