Bernat Soria: "El embrión debe vivir al menos dos meses en el útero para ser humano"
Bernat Soria: "El embrión debe vivir al menos dos meses en el útero para ser humano"

Andalucía os ha ofrecido la posibilidad de trabajar con células madre embrionarias, pero vuestra investigación no empezará de cero, lleváis mucho tiempo trabajando en ello. ¿En qué consisten las investigaciones que estáis realizando para curar la diabetes?
Cuando el Ministerio de Sanidad nos prohibió el uso de células madre embrionarias, nos dirigimos a Singapur. Allí abrimos un nuevo laboratorio, hace aproximadamente un año, y trabajamos con células madre de embriones humanos. Nos dieron permiso para ello.
Hemos tomado embriones humanos y hemos extraído células madre para poder crecer y transformarse en el laboratorio. Finalmente hemos conseguido que estas células madre produzcan insulina. De momento hemos conseguido buenos resultados.
Hace unos años curaron ratones diabéticos mediante el trasplante de células madre embrionarias. ¿Son tan espectaculares los resultados que habéis conseguido con los seres humanos?
Bueno, todavía no hemos conseguido resultados tan sorprendentes como en el ratón. En el ratón estas células totipotentes, que aún no están especializadas, las ponemos a producir insulina y luego las trasplantamos en el ratón. Eso les curó la diabetes. Eso es lo que queremos conseguir en los seres humanos, pero todavía no hemos empezado a realizar trasplantes.
No hemos tenido tiempo suficiente.
En Europa, en general, la legislación es bastante estricta respecto al uso de células de embriones humanos. ¿Qué opina la comunidad científica?
Creo que el papel de los científicos es respetar la opinión y la sensibilidad de quienes piensan diferente. Pero hay que tener en cuenta que todas las asociaciones de científicos, la Academia Nacional de la Ciencia, todos los premios Nobel y, en general, todas las personas que nunca han vulnerado los derechos humanos, consideran que hay que utilizar embriones, que sus células madre son necesarias y que hay que hacer clonación terapéutica.

¿Cómo es posible que las personas que saben tanto y tienen tanto sentido se posicionen a favor y los gobiernos no? Yo sé que los gobiernos de Estados Unidos y España han vulnerado a menudo los derechos humanos, pero eso no ha ocurrido en la Academia Nacional de la Ciencia ni en las asociaciones de científicos. Defienden el uso de embriones por la existencia de datos biológicos favorables.
¿Y cuáles son esos datos biológicos? ¿Los embriones son o no humanos? Y es que ese es el argumento de los contrarios a esta técnica, los embriones son humanos. ¿Pero qué dice la ciencia?
Según los datos biológicos, el embrión de pocas células aún no es humano. Es cierto que hay que pasar por ahí para convertirse en humano después, pero eso no significa que sea humano.
Algunos creen que el embrión es desde el principio, incluso cuando es monocelular; en ese momento recibe el alma. Y cuando esa única célula se divide, ¿cuál de ellas toma el alma? No quiero bromear, pero... ¿En ese momento son dos medias personas?
Es cierto que cada embrión tiene una combinación de genes especial, única e irrepetible. Pero eso no hace ser humano. Es vital, porque las células están vivas, pero la vida humana y el hombre no son lo mismo.
Piénsese que, según la religión católica, el embrión se convierte en ser humano en el mismo momento de la fecundación; según los judíos ortodoxos, en el día 40; y según los musulmanes, entre los días 40 y 120.
¿Y para los científicos?

Es difícil definirlo. Y es que ¿a qué criterios hay que seguir? ¿Cuándo surge el hombre cuando aparecen las primeras huellas del sistema nervioso? ¿Y sin cerebro es humano? ¿Qué es el ser humano? Es muy difícil definir criterios.
Mira, el embrión alcanza la identidad inmunológica entre las semanas 6 y 7 y adquiere la capacidad de vivir fuera del útero en el 5º o 6º mes. Creo que el embrión tiene que vivir al menos 2 meses en el útero para ser humano.
Y en la investigación se utilizan embriones de pocos días, ¿no?
Sí, se utilizan embriones de muy pocas células, creados a pocos días de la fecundación, preferentemente a 5-7 días. Por eso estoy a favor de utilizar embriones en la investigación. Si el conocimiento derivado de estos embriones sirve para reducir el dolor de los pacientes, no es ético no utilizarlo. Yo en eso tengo problemas éticos, no en el uso.
Y si se hace bien, no creo que sea muy peligroso afirmar que usando las células madre de estos embriones, algún día obtenemos células que producen y almacenan insulina.
Sin embargo, ¿en ocasiones no se da una importancia desproporcionada a ciertos estudios y no se crean expectativas corruptas para lograr el respaldo de la sociedad?
Ese comportamiento no sería ético. La responsabilidad de los científicos es repetir una y otra vez que la investigación es necesaria, pero a veces no es suficiente; muchas veces no se consigue el objetivo personal, pero no se puede engañar a la sociedad.
Nuestros primeros resultados parecen indicar que el camino que estamos realizando es el correcto. Pero el investigador no puede conocer el resultado, por lo que nadie puede pedir garantías de lo que puede ocurrir. Por ejemplo, uno de los argumentos utilizados por quienes se oponen al uso de células madre es bastante pobre: todavía no se ha demostrado su utilidad. Por supuesto, mientras nadie lo haga no se podrá demostrar. Que no sea útil, ni que sea inútil. Pero en mi opinión, la investigación científica, la investigación biomédica, ha dado muchos ejemplos de mejora de la calidad de vida de la sociedad en el último siglo y merece la pena intentarlo. No sé si hay solución, pero si hay, se encuentra investigando. Sin investigar no encontraremos nada.
¿Y qué dicen los pacientes, los diabéticos?

Cuando hablo con los pacientes saben que no hay garantía de éxito, pero quieren que se avance en la investigación por si acaso, si de ahí saliera algún conocimiento útil... Tenemos, por tanto, la protección de los pacientes. La confederación de todas las asociaciones de minusválidos me dio un premio, una confederación que reúne a más de tres millones y medio de personas. Los pacientes decidieron por unanimidad entregarme el premio. El acto contó con la presencia de ministros. No sé si se alegraron de entregarme el premio porque eran del PP. Pero los pacientes confian y quieren investigar.
Por lo tanto, ¿los mayores inconvenientes los ponen los políticos y no la sociedad?
En mi opinión, más que políticos, un partido político concreto. Y tampoco la mayoría de ese partido, sino las personas que tienen autoridad dentro del partido. Tienen un gran recelo con todo esto.
Andalucía ha tenido valentía y ha apostado. Y no es la primera vez, la píldora del día después, el transexualismo... ha sido un tema muy importante. Y el gobierno central ya ha recurrido. Lo que hace el Gobierno central es eso: primero recurrir, luego llevarlo al Tribunal Constitucional y finalmente aprobar la ley para todo el Estado. En el caso de los embriones, Andalucía se ha enfrentado y probablemente lo mismo. Los datos indican que poco a poco van a ser aceptados en todos los países, aunque Bush y Aznar van en contra.
Bernat Soria es catedrático de fisiología y director del Instituto de Bioingeniería de la Universidad Miguel Hernández de Alicante. Es uno de los investigadores más importantes de España, prueba de ello es su gran número de premios. Pero el investigador valenciano conoció la polémica sobre células madre.

Fue hace unos cuatro años. Lo que se consiguió entonces supuso un gran esfuerzo, ya que logró curar ratones diabéticos con células madre embrionarias. Y Bernat expresó su próximo objetivo: curar la diabetes también en los seres humanos. Pero en España no es posible utilizar células madre de embriones humanos para investigaciones científicas. Los embriones pueden ser utilizados para la inseminación artificial, pero en ningún caso para investigaciones científicas que puedan ser la cura de muchas enfermedades. Y el investigador valenciano se lanzó valientes al extranjero.
Soria, sin duda, tiene una larga trayectoria profesional. Su primer contacto con la ciencia fue con las neuronas, que realizó su tesis doctoral sobre el transporte del pulso nervioso. Y se dirigió entonces a Alemania para trabajar con dos jóvenes prometedores. Trabajaban con los canales iónicos que aparecen en la membrana celular, desarrollando una técnica llamada patch clamp. Por ello, los otros dos recibieron el premio Nobel.
“Luego fui a Inglaterra y empecé a trabajar con una célula muy especial, que segrega insulina en el área, que en cierta medida actúa como neuronas”. Así empezó a investigar la diabetes. “ intentamos hacer células artificiales. Queríamos que el gen de la insulina se introdujera artificialmente a las células normales y que éstas generaran insulina, pero fracasamos una y otra vez”. Las células generaban insulina, pero no como las células, no era posible controlar la secreción de la insulina, ya que utilizaban células que estaban previamente diferenciadas. “Por eso, en 1996 decidí utilizar células madre para obtener células productoras de insulina”.
Hay 220 millones de diabéticos en el mundo y, por tanto, además del problema de salud, también es un problema socio-económico. Existen diferentes tipos de diabetes, pero según los expertos, la diabetes tipo 2, la más común, es consecuencia directa de una vida sedentaria. Las células productoras de insulina comienzan a morir y el paciente no puede tomar glucosa de la sangre. Por tanto, es imprescindible inyectar insulina todos los días. Las personas con diabetes son altamente dependientes de la dosis de insulina y los investigadores han insistido en desarrollar nuevas terapias: células artificiales, trasplantes... Bernat Soria es el coordinador del programa de trasplantes en España, pero en este método se observan grandes limitaciones. “En el Estado hay 2-3 millones de diabéticos, con un máximo de 200 trasplantes anuales. Sólo uno de cada 10.000 diabéticos recibiría el nuevo órgano”. Estos son los datos que aborda Bernat Soria cuando pide un cambio legislativo para trabajar con células madre embrionarias. |

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