Jornadas internacionales de conservación de anfibios
2002/02/18 Imaz Amiano, Eneko - Elhuyar Zientziaren Komunikazioa
Estamos acostumbrados a reconocer que la causa de este tipo de problemas es la pérdida o deterioro del hábitat. Ejemplo de ello es el caso de la ranita meridional de Mendizorrotz (Hyla meridionalis), situada en la costa vasca. Pero es más raro escuchar que las poblaciones han bajado incluso en zonas protegidas o donde no hay contaminación significativa. Y eso es lo que parece pasar con los anfibios.
Para hablar de todo ello, la Sociedad de Ciencias Aranzadi ha celebrado recientemente en San Sebastián unas Jornadas Internacionales de Conservación de Anfibios. Como suele suceder en estos casos, no han encontrado una solución milagrosa definitiva, pero los investigadores procedentes de diferentes lugares han explicado en qué consisten, transmitiendo experiencias y conociendo nuevas líneas de trabajo que pueden servir a cada uno.
Entre otras cosas, se dio cuenta de la influencia de los parásitos sobre los anfibios y de cómo es muy probable que en muchas poblaciones los propios investigadores, a través del material y de la vestimenta utilizada, hayan introducido nuevos parásitos (concretamente lo que ocurre con los hongos quitridios).
También se ha mencionado el calentamiento del clima para explicar, por un lado, que los amplexos y puestas de los anfibios son cada vez más rápidos, pero también la influencia del cambio de temperatura en la durabilidad de los pozos, en la temperatura del agua, etc.
Otro campo que se está investigando bastante en los últimos años es la influencia de la radiación de la luz ultravioleta en los anfibios. El aumento de la radiación afecta a la salud de los animales de las especies no protegidas, especialmente a los huevos.
Estos tres factores pueden ser, entre otros, algunos de los problemas de los anfibios en zonas bien conservadas, pero también se han estudiado la contaminación convencional, la lluvia ácida y la pérdida de hábitat. En esta última parte se ha localizado el problema de la ranita meridional en Gipuzkoa y se han dado a conocer los trabajos realizados y en curso para asegurar la sostenibilidad de la especie.
No obstante, también se ha señalado la importancia de la escala temporal en los estudios de anfibios, es decir, en aquellos ciclos de anfibios en general bastante complejos, se ha puesto de manifiesto la necesidad de realizar un seguimiento de 10-15-20 años en lugar de seguimientos de poblaciones de 2-3 años, sobre todo en zonas de clima cambiante.
Además de las charlas, se han realizado mesas redondas y una salida al monte.
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