}

Por detrás de los irlandeses prehistóricos

2000/03/28 Roa Zubia, Guillermo - Elhuyar Zientzia

La genética no sólo sirve para curar enfermedades o clonar seres. También se utiliza para observar migraciones prehistóricas.

Dos grupos de investigadores de Irlanda e Inglaterra se han unido para analizar algo que no es habitual en el campo de la genética. Su objetivo es conocer la llegada del hombre prehistórico a Irlanda. Para ello han utilizado cromosomas Y y apellidos de personas. Los cromosomas Y dejados por el padre a su hijo se analizan en laboratorio. Pero es más difícil asegurar el origen de los apellidos, pero hasta ahora ha sido herencia masculina.

En el mundo se conocen nueve grupos de haplotaris diferentes (grupos de cambios genéticos) relacionados con localizaciones concretas. Uno de ellos, haplotalde 1 (hg1), es frecuente en Irlanda. El 78,1% de la población insular presenta estas características genéticas en mayor o menor medida.

Distribución dentro de Irlanda

Para clasificar los orígenes de las muestras, Irlanda se ha dividido en los siete territorios más conocidos de las siete cohorte de apellidos. Cuatro de ellos son prehistóricos, de origen gaélico (Ulster, Munster, Leinster y Connaught). Las otras tres están influenciadas por migraciones históricas (escocesa, normandía e inglesa).

Las muestras occidentales (Gaélicos) presentan una frecuencia mayor del grupo hg1 que las orientales. Los del territorio de Connaught, es decir, los límites occidentales entre ellos, tenían una frecuencia del 98%. Cuando no se tienen en cuenta los casos de apellidos duplicados se obtienen los mismos resultados.

Este cambio de frecuencia también se ha analizado en muestras europeas. El resultado es similar, es decir, se observa un incremento de este a oeste en el grupo hg1 desde Turquía (1,8%) hasta Euskal Herria (89% al sur). Las migraciones de agricultores neolíticos procedentes de Oriente Próximo explican este gradiente europeo.

Los grupos hg1 de muestras de los pueblos gaélicos irlandeses tienen muchas similitudes y por eso se puede considerar que todos tuvieron el mismo ancla. Sin embargo, la parte ajena al grupo hg1 no tiene esa coherencia. Estos fragmentos son menos abundantes en muestras de países orientales irlandeses. Probablemente hay que buscar la causa en los flujos génicos a más tardar.

De todos estos hallazgos se puede deducir que el haplotalde originario de Irlanda es hg1. Sabiendo esto y, por supuesto, recopilando muchos más datos, se puede calcular cuándo el genotipo es «de cuándo», es decir, cuándo estuvo sin cambios. Los investigadores estiman que hg1 es de hace 4.200 años. Este dato está de acuerdo con la idea de la historia de Irlanda de 9.000 años. Hay errores, por supuesto, y además los debidos al grado de precisión que supone la propia metodología. Sin embargo, las grandes migraciones prehistóricas fueron favorecidas por la agricultura. Por tanto, se puede avivar cuándo el desarrollo de la agricultura tuvo lugar en Europa o, al menos, aproximarse mediante este tipo de investigaciones. Desde el punto de vista de los orígenes de los pueblos y las culturas, nos abren también una pequeña ventana.

Gai honi buruzko eduki gehiago

Elhuyarrek garatutako teknologia