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Reproducción de pinturas prehistóricas en Ekain

2000/03/21 Carton Virto, Eider - Elhuyar Zientzia

Las técnicas cinematográficas abren el camino para socializar la obra de artistas antiguos

Como la oveja Dolly es una fiel copia de su pionero, el nuevo Ekain que se está construyendo en Zestoa será el gemelo de la cueva original. Las técnicas utilizadas para la elaboración de decorados en el cine se han basado en la reconstrucción de las paredes y pinturas de la cueva, con el fin de que los visitantes que se acercan a ella tengan una impresión al estar en Ekain.

En Junio, en 1969, los miembros de Aranzadi se encontraron con la decisión de cerrar la cueva, consciente de la importancia de su tesoro. En Ekain se puede ver una espectacular colección de pinturas de los hombres de la época Madeleine: imágenes y grabados de caballos, ciervos, bisontes, osos, etc., en diferentes galerías de la cueva, siendo el caballo la imagen más frecuente. Desde su descubrimiento, Ekain ha permanecido cerrado, lo que ha permitido conservar sus imágenes y grabados en las mismas condiciones de conservación que los encontrados. En las numerosas cuevas visitadas, en el lugar de Santimamiñe, el arte rupestre ha sufrido enormes daños por la respiración de los visitantes y las bacterias y hongos que transportamos con nosotros. En junio, sin embargo, las medidas adoptadas han evitado este tipo de problemas.

Las estrictas medidas de protección del arte rupestre, sin embargo, dejan en manos de unos pocos un legado tan importante. Para la conservación de las pinturas hay que mantenerlas fuera de los ojos de los visitantes y, por tanto, perder una oportunidad única para conocer in situ nuestro pasado. ¿Pero para qué guardar lo que no se puede ver? Consciente de esta paradoja, el Ayuntamiento de Zestoa puso en marcha un proyecto de réplica de la cueva de Ekain. El proyecto va a buen ritmo y puede estar finalizado para la primavera o verano del próximo año.

La réplica de la cueva de Ekain se ha realizado aplicando la técnica de fac-simile utilizada anteriormente para la realización de réplicas de los vientos de Altamira, Lascaux y Niaux. La técnica, basada en la fotografía, permite reconstruir la obra original a tamaño real, en tres dimensiones y con toda precisión.

El primer paso de la obra es recoger datos sobre la cueva original. Para ello se recogen los datos del relieve del muro mediante la técnica denominada estereofotometría, es decir, se realizan fotografías tridimensionales y se trabajan por ordenador. La correcta recogida de los datos es imprescindible para poder realizar una copia fiel, por lo que este primer paso puede ser largo, sobre todo cuando, al igual que en Ekain, el relieve presenta grandes variaciones. Recopilados y elaborados estos datos, el segundo paso consiste en la reconstrucción a escala de los muros mediante la técnica de fac-simile antes mencionada. En definitiva, las fotografías en tres dimensiones recogidas se proyectan sobre la pared a modelar y se realiza un calco de lo visto. Pero aunque el principio de la técnica es simple, el trabajo a realizar es inmenso, ya que se trabaja con una precisión de centímetros.

Las planchas de poliéster para hacer el muro se unen una tras otra. Utilizando los datos recogidos por el ordenador, se le da la forma correspondiente a cada lámina, obteniendo el perfil general del muro. Después, a mano y con paciencia, hay que igualar todas las capas para poder hacer lo que será el molde de la pared original.

En la segunda fase se realiza la restauración mineral del muro, copiando en detalle el relieve de la cueva original. Para ello se utilizan compuestos acrílicos basados en materiales naturales (arena, arcilla, sílice, etc.). Estos compuestos son fáciles de manejar y sirven para unir invisibilmente las partes de la pared que se han trabajado separadamente. Además son flexibles, es decir, utilizando diferentes variedades de compuestos acrílicos, las transiciones de las composiciones minerales que se dan en las paredes minerales pueden copiarse con toda fidelidad.

Una vez realizado el muro, comienza la parte más artística de la obra: la reproducción de imágenes. Una vez más, al igual que en el relieve de la pared, se utilizan proyecciones de fotografías tridimensionales. La imagen se proyecta en la pared y el pintor hace calco. De nuevo se utilizan sustancias naturales para respetar los colores originales: la tierra, el carbón y los óxidos naturales son los mismos que los pintores prehistóricos.

La copia así obtenida y la original son inseparables para el espectador desconocido y para los ojos del sabio. En el caso de los meses de junio, la réplica estará compuesta por copias de tres grandes grupos de pintura. Junto a los muros también se copiará el suelo y todo se redondeará con una escenografía que hará al espectador la sensación de estar en la cueva original.

El agua, elemento de gran importancia en Ekain, tendrá un papel especial en esta escenografía. En Ekain se ha buscado un ambiente intimista, una réplica más que una catedral.

Catedral del arte rupestre

La cueva francesa de Lascaux y las espectaculares imágenes que forman la catedral del arte rupestre, junto con la cueva, fueron descubiertas en 1940. Las paredes de Lascaux están llenas de figuras de toros, dibujadas sobre y junto a la otra; los pintores prehistóricos utilizaron los colores y el relieve del muro con una inmensa maestría para hacer figuras de toros con vida propia. El toro más grande pintado tiene 5 metros de punta a cola, una imagen espectacular. La cueva se cerró en 1963, pero desde 1983 las imágenes mencionadas se pueden ver en la réplica de Lascaux II, situada a 200 metros de la original Lascaux. El adelgazamiento abandonado se ha convertido en una cueva con la misma temperatura y humedad que la original de Lascaux, y la existencia de réplica no le resta visibilidad a lo que se puede ver en ella.

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