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Diversidad en el mar profundo

2004/06/28 Andonegi Beristain, Garazi - Elhuyar Zientziaren Komunikazioa

La revista Nature ha publicado un nuevo artículo del investigador de AZTI Xabier Irigoien. Ha analizado la diversidad en el mar profundo, concretamente la biodiversidad de las algas.

Diversidad de especies

La mayoría de los estudios sobre la diversidad de los seres vivos se han realizado con seres terrestres. Estos estudios demuestran que muchas veces la mayor diversidad se da en los seres vivos de producción media. La producción debe entenderse como una relación entre la energía recibida y la biomasa obtenida.

Sin embargo, se cuestiona si esos modelos que ponen en relación la diversidad y la producción son también útiles para los seres vivos más pequeños, como por ejemplo los que dominan el mar. Según algunos estudios, los pequeños seres vivos no siguen patrones de los grandes en cuanto a diversidad.

Sin embargo, en los estudios realizados por el investigador de AZTI con algas –fitoplancton– se observa que el fitoplancton alcanza su mayor diversidad con una producción media.

Para llegar a esta conclusión, Xabier Irigoien ha realizado un estudio sobre las especies de fitoplancton con más de 350 muestras obtenidas de los océanos del mundo. Aunque aparecen otros modelos, el modelo unimodal que relaciona diversidad y producción es el que más aparece. En este modelo, cuando la producción es baja, la diversidad también es baja; cuando la producción es media, la diversidad es alta; y cuando la producción aumenta, la diversidad vuelve a ser baja. Por tanto, el modelo tiene forma triangular.

A la vista de ello, se puede pensar que algunos de los modelos utilizados en la ecología terrestre pueden servir también para la ecología marina.

¿Por qué un modelo unimodal?

En el caso del fitoplancton, son muchas las razones que justifican la mayor diversidad con la producción media: historia de la comunidad, distribución de los domicilios, competencia en la obtención de alimentos o recursos, relación entre competidores, abundancia/escasez de alimentos, tamaño de las algas, etc. Por ejemplo, en la costa, si las aguas son ricas, la productividad será alta, pero habrá muchos predadores. En consecuencia, sólo las especies de fitoplancton más preparadas para combatir a los depredadores permanecerán y la diversidad será reducida. Sin embargo, si las aguas no tienen alimento, las especies de fitoplancton que bajan su productividad y sobreviven serán raras y escasas. La mayor diversidad de fitoplancton se da cuando los alimentos están moderados, es decir, cuando la productividad es media.

Además, este modelo resulta aún más interesante si se analiza el zooplancton. El zooplancton se alimenta de fitoplancton y el estudio de Irigoien demuestra que la diversidad de ambos no está relacionada. Esto no es muy habitual en los seres vivos de la tierra, ya que cuando la diversidad de presas es grande hay más tipos de predadores.

La diferencia entre especies marinas y terrestres puede ser el tamaño de un ser vivo que sirve para otros. De hecho, el fitoplancton es muy pequeño y la gran complejidad de la hidrodinámica marina.

Entonces, ¿qué delimita la diversidad del zooplancton? Según el investigador de AZTI, al igual que ocurre con el fitoplancton, la competencia por los alimentos y la resistencia a los depredadores son la clave. Por lo tanto, las teorías de la ecología siguen teniendo mucho que investigar sobre el depredador y la presa, y tal vez, desde el punto de vista de la diversidad, finalmente se opte por repartir esa pareja.

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